Según Naciones Unidas, América Latina tira a la basura un tercio de la comida que produce. Representa el 6 por ciento del total global de 1.300 millones de toneladas anuales de alimentos descartado.
Del total de comida que va a dar a la basura en todo el mundo, unos 1.300 millones de toneladas anuales, el 6 por ciento, unos 78 millones, la desperdician los latinoamericanos.
Esto dice el informe ‘Pérdidas y desperdicios de alimentos en América Latina y el Caribe’ de la FAO, que señala que dichos alimentos, bien aprovechados, serían suficientes para alimentar a 2.000 millones de personas, es decir, calmar el hambre de todo el mundo.
(…) dichos alimentos, bien aprovechados, serían suficientes para alimentar a 2.000 millones de personas, es decir, calmar el hambre de todo el mundo.
Los productores y los consumidores, con el 28 por ciento cada uno, son los eslabones de la cadena alimentaria que más desperdicia y genera pérdidas de alimentos, indicó la FAO. Siguen el canal de distribución (22 por ciento), mercadeo (17 por ciento) y procesamiento (6 por ciento).
Los productores y los consumidores, con el 28 por ciento cada uno, son los eslabones de la cadena alimentaria que más desperdicia
El volumen total anotado incluye el 30 por ciento de los cereales, entre el 40 y el 50 por ciento de las raíces, frutas, hortalizas y semillas oleaginosas, el 20 por ciento de la carne y productos lácteos y el 35 por ciento de los pescados.
“Con los alimentos que se pierden en la región sólo a nivel de la venta al público –es decir, en supermercados, mercados, almacenes y demás puestos de venta– se podría alimentar a más de 30 millones de personas, es decir, al 64 por ciento de quienes sufren hambre en la región.
Como soluciones a esta problemática, la FAO dijo que hay formas de evitar las pérdidas y desperdicios en todos los eslabones de la cadena, principalmente mediante inversiones en infraestructura, mejorando la eficiencia de los sistemas alimentarios.
(…) la FAO dijo que hay formas de evitar las pérdidas y desperdicios en todos los eslabones de la cadena, principalmente mediante inversiones en infraestructura (…) Un ejemplo que citó la entidad de las Naciones Unidas es el de los bancos de alimentos, que reúnen comida que por diversas razones sería descartada para su redistribución.
Un ejemplo que citó la entidad de las Naciones Unidas es el de los bancos de alimentos, que reúnen comida que por diversas razones sería descartada para su redistribución. Estos ya existen en por lo menos ocho países latinoamericanos.
Para enfrentar el problema de forma más directa, la FAO lanzó en 2011 la llamada Iniciativa Global para la Reducción de Pérdidas y Desperdicios de Alimentos (Save Food), una cual reúne a 250 socios, incluyendo organizaciones y empresas públicas y privadas, en un intento de cambiar las prácticas de gestión, las tecnologías y el comportamiento de las personas en todo el mundo.