Los argentinos temen perder su empleo este año
El 34 por ciento de los trabajadores cree que puede perder su empleo este año, mientras que entre los más jóvenes, el 47 por ciento tiene el mismo temor, según una encuesta de TNS Gallup. La situación “genera una sensación de desasosiego respecto del futuro”, señalaron especialistas a Terra. La posibilidad de quedarse sin trabajo en un país de los llamados subdesarrollados es «tan posible» (valga la redundancia), que personas que continúan en actividad tienen temor de volver a engrosar las cifras de la temida desocupación. Las personas de menos nivel adquisitivo son los que más temen a la situación del desempleo: un 44 por ciento de la clase baja, dentro de los trabajadores, contra 14 de la clase alta y media alta. Entre los más jóvenes, el 47 por ciento tiene el mismo temor de quedarse sin trabajo, mientras que los adultos de 65 años o más son más optimistas ya que sólo el 25 por ciento cree que puede perderlo. Según TNS Gallup, el 37 por ciento de los argentinos encuestados cree que conseguiría trabajo rápidamente mientras que el 63 por ciento cree que le llevaría un tiempo. Un especialista consultado por Terra y que tuvo acceso a los datos dijo que los jóvenes de más bajos recursos “son los que no tienen acceso a la educación, lo que genera una sensación de desasosiego respecto del futuro. De modo que la educación sigue siendo vista como un factor clave de crecimiento así como una puerta de acceso al mercado laboral”. La dificultad de mantener el nivel de demanda de empleo El economista y director del Centro de Estudios de Población Empleo y Desarrollo (CEPED), Javier Lindenboim, explicó: “Lo que está claro es que Argentina volvió, después de varios años de alto ritmo de creación de empleo a favor del crecimiento económico, a mostrar la enorme dificultad de mantener una demanda sostenida de fuerza laboral. Algunos autores afirman que el problema de los años recientes es que se basó la absorción de empleo en buena medida en las PyMEs pero éstas son poco dinámicas. Por ello ante las primeras dificultades económicas generales son éstas las que dejan de demandar o directamente se desprenden de trabajadores”. Por la crisis financiera internacional y tras haber sufrido la de 2001 en Argentina, es lógico el temor a quedarse sin trabajo en un país que aún hoy mantiene una tasa de desempleo importante. Fuente: Terra