La oferta de mujeres en el mercado laboral creció más que la de los hombres
Según un trabajo del Instituto de Estudios Laborales y Sociales de la UCES, «frente a la severa desaceleración de la tasa de crecimiento de la
economía las finanzas familiares debieron reforzarse con la búsqueda de
un empleo remunerado por mayor parte de la franja femenina del hogar”.
“Los datos correspondientes al tercer trimestre de 2012 mostraron un punto de giro en el ritmo de variación de la fuerza de trabajadores por género respecto del comportamiento que mostró en los dos años previos. Se repitió el fenómeno de 2009: frente a la severa desaceleración de la tasa de crecimiento de la economía las finanzas familiares debieron reforzarse con la búsqueda de un empleo remunerado por mayor parte de la franja femenina del hogar”, observa una investigación del Instituto de Estudios Laborales y Sociales de la UCES.
La población argentina está integrada por más cantidad de mujeres que de varones. Sin embargo, a la hora de concurrir al mercado de trabajo la relación se invierte notablemente. Así, la brecha de 3,2 puntos porcentuales a favor de las primeras en el caso del total de habitantes, se transforma en negativa en 16,6 puntos porcentuales en el de la oferta laboral por género en cantidad de personas y en 24,4 pp en las tasas de participación.
De ahí que considera el análisis del instituto de la casa de altos estudios que “en un mundo donde la mujer en forma creciente gana terreno en los ámbitos de la política y de las empresas, alcanzando posiciones de liderazgo que hace apenas 15 o 20 años atrás parecían lejanos, no resulta sorprendente que se asista a un punto de giro. Más aún cuando según el INDEC a fines de 2012 el salario horario promedio de la franja femenina ($22,7) superó al del segmento masculino ($22,2), aunque en términos absolutos los varones ganaban por mes más ($3.900) que el sexo opuesto ($3.000) porque, en promedio, trabajan 44 semanales frente a 33 de su contraparte”.
Sin embargo, IDELAS-UCES estima que “el repentino salto en el último año, donde la ampliación de la participación femenina en el mercado de trabajo en cantidad casi triplicó a la que acusó la franja masculina, no parece explicarse por un fenómeno tendencial, sino claramente circunstancial, esto es forzado por una coyuntura donde repentinamente cambiaron las condiciones económicas domésticas. El ritmo de aumento del PBI desaceleró violentamente en 2012 respecto de 2011”.
Otro rasgo distintivo que surgió de la EPH del INDEC en el último año fue el apreciable aumento de la oferta de trabajo de la población de menos de 29 años, más intensa en el segmento masculino que en el femenino. Y dado que en el agregado general las tasas de las PEA de cada género tuvieron una variación modesta, IDELAS-UCES considera que “ese comportamiento parece más vinculado a la necesidad de compensar la falta y hasta pérdida de oportunidades de obtener un empleo de la población madura, que a un cambio virtuoso del ciclo de la economía”.
En el caso de las mujeres, mientras que la tasa de participación de la porción de más de 29 años hasta 64 disminuyó en el último año en 0,6 puntos porcentuales, a 64%, la de 14 a 29 años se elevó en 1,2 puntos porcentuales, a 42,1% de la población del segmento. De ahí surgió que el agregado nacional se elevó en sólo 0,4 puntos porcentuales, a 48,5% del total de habitantes del género.
En la sumatoria nacional significó un aumento en 231.023 personas, según la conversión que hizoIDELAS-UCES de las tasas informadas por el INDEC al cierre del tercer trimestre a la proyección de población total que también hizo el organismo oficial de estadística.
Aunque en los parciales se detectó un incremento de 300.291, con alta concentración en la provincia de Buenos Aires (185.525), seguida por Córdoba con expansión de 39.196 y en menor cuantía por otras 11 jurisdicciones: Mendoza, San Luis, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Misiones, Salta, Santiago del Estero, Santa Fe, Tierra del Fuego y Río Negro; y disminución en 11 distritos que totalizaron 69.268 mujeres. En este caso, sobresalió la baja en 42.808 en la Ciudad de Buenos Aires y en menor medida en San Juan, Chaco, Tucumán, Catamarca, Jujuy, La Rioja, La Pampa, Chubut, Neuquén y Santa Cruz.
Entre los hombres se detectó una variación similar: mientras que en el segmento de 14 a 29 años se registró una suba de la PEA en 1,5 puntos porcentuales, a 59,7% del total, en la siguiente de más de 29 a 64 años se estancó en 93% de la población del género.
Sin embargo, una vez más la EPH arrojó en este grupo una severa inconsistencia, puesto que, como viene ocurriendo desde 2008, la tasa de participación del conjunto masculino se redujo en el último año en 0,3 puntos porcentuales, a 72,9% del total de habitantes varones.