Argentina, record mundial psi: hay 145 psicoanalistas cada 100 mil habitantes
Hay una tierra prometida del diván y se llama Argentina. El país es el lugar en el mundo con mayor proporción de psicólogos por persona, según un reciente estudio realizado durante más de diez años por dos investigadores argentinos. Ciento cuarenta y cinco profesionales cada 100 mil habitantes es la cifra que convierte al país, de lejos, en la meca mundial del psicoanálisis. Un fenómeno que no tiene punto de comparación con lo que sucede en otras latitudes y que, en gran parte, aunque haya distintas hipótesis explicativas, sus causas siguen siendo un misterio.
El país que le sigue a la Argentina en cantidad de psicólogos per cápita es Dinamarca, con 85 profesionales cada 100 mil habitantes. Y después vienen Finlandia, Suiza, Noruega y Alemania. Todos países superdesarrollados, lo cual excluye el razonamiento común y apresurado que relaciona consultas al psicólogo en nuestro país con inestabilidad económica o precariedad social. “Existen muchas teorías que buscan explicar qué es lo que sucede en el país con los psicólogos. Hay una que habla de nuestro origen inmigratorio. Otras se refieren a la influencia del pensamiento europeo y al impacto de los psicoanalistas que se instalaron en la Argentina después de la Segunda Guerra”, dijo a Crítica de la Argentina el licenciado en psicología Modesto Alonso, quien dirigió la investigación junto a la licenciada Paula Gago.
MUCHAS MUJERES. El universo de la psicología nacional también tiene un fuerte rasgo de género: el 80% de los profesionales son mujeres. El 75% de los psicólogos se dedica a la actividad clínica. A nivel territorial, la ciudad de Buenos Aires pica en punta con 789 cada 100 mil habitantes, lo que equivale a uno cada 127 personas.
Le siguen las provincias de Córdoba, Neuquén y Mendoza, en ese orden. “Descubrimos que hay psicólogos no sólo en las ciudades, sino también en los pueblos del interior. Se está perdiendo el miedo a la terapia, el que acude es porque adquirió la noción de que se lo puede ayudar”.
La mayoría de las matrículas son de universidades públicas. Al contrario de lo que se puede suponer, en los divanes de la Argentina no sólo cuentan sus vidas integrantes de la clase media o clase alta, sino también gente de sectores populares, que pueden recurrir al psicólogo gracias a los hospitales públicos. “Eso es algo poco conocido, hay un preconcepto sobre que la gente de bajos recursos no puede analizarse y no es así. En los hospitales, traté exitosamente a pacientes de estratos muy desposeídos”, señaló a este diario el Dr. Renato Canovi. Para el especialista, habría una relación entre presencia de psicólogos y consumo de psicofármacos. A mayor difusión de los tratamientos psicológicos, menos empastillamiento de la sociedad. “Mucha gente en la Argentina decide optar contra la pastilla. Y eso tiene que ver con el éxito de la psicología –sostiene Canovi–. No tenemos estadísticas confiables, pero sería interesante cotejar qué porcentaje hace psicoterapia en el país y qué porcentaje en el extranjero consume psicofármacos”. La tendencia siempre es ascendente: desde el año 2000 a esta fecha, la cantidad de psicólogos creció un 50 por ciento.
Fuente: Crítica de la Argentina