Una mujer es asesinada cada tres días
“Hoy no salís viva”, amenazó Andrés González a su ex mujer Jessica Loza, empleada del supermercado Coto de Boedo, antes de dispararle cuatro veces al pecho con su revólver calibre 38, en agosto pasado. Jessica murió en el acto y su nombre quedó grabado en la lista de los femicidios cometidos en 2008 en la Argentina, donde no hay cifras oficiales, pero se calcula que una mujer es asesinada cada tres días en la forma más extrema de violencia de género.
El número se desprende de un relevamiento del portal Artemisa Noticias, que precisó que el año pasado se registraron 105 crímenes de mujeres en nombre del patriarcado, superando la cifra de los 95 casos que se conocieron en 2007 y los 68 difundidos en 2006. En lo que va de este año, ya se registraron otros 38, 14 de ellos durante el mes de marzo. Los datos surgen de un monitoreo de Artemisa a partir de información de los diarios y de las tres agencias de noticias nacionales.
José Arce es el principal sospechoso del femicidio más resonante de 2008: se lo acusa de haber mandado a matar a su joven esposa Rosana Galliano, asesinada de tres balazos el 16 de enero de 2008. A pesar de haber negado los cargos, fue detenido el pasado martes 21 junto a su madre, Elsa Aguilar, quien ahora cumple prisión domiciliaria.
La Convención de Belém do Pará, ratificada en la Argentina en 1996, obliga al Estado a “actuar con la debida diligencia para prevenir, investigar y sancionar la violencia contra la mujer”. Sin embargo, todas las críticas apuntan a la violación de este mandato.
“Hay asociaciones civiles y ONG que hacen sus propios estudios al respecto. Es decir, no hay un criterio único para el registro, lo que marca una ausencia de políticas de Estado sobre el tema”, reclamó ante Crítica de la Argentina Gabriela Barcaglioni, periodista de Artemisa y militante de la Casa de la Mujer “Azucena Villaflor”.
Adriana Balaguer, responsable del sitio Mujeres sin Fronteras, coincidió con la periodista y resaltó un estudio de Amnesty International: “En la Argentina, cada dos días y medio muere una mujer víctima de la violencia, aunque las cifras enfrían la radiografía de una situación gravísima, que tiene que ver con sociedades autistas en las que el machismo es parte del folclore. El común denominador es la ausencia del Estado y suele ser mayor en sociedades con democracias débiles”.
MÍA, SÓLO MÍA. “Te gané, Juan. Me la llevo yo”, podía leerse en el cuerpo de Daiana García, gracias a un escrito hecho por su novio minutos después de estrangularla en una pensión de la provincia de Río Negro. Los celos, la dificultad de aceptar la separación, las disputas conyugales y la custodia de los hijos son algunas de las causas que se presentan como móviles de estos crímenes. “Es un asesinato que se produce sólo por creer que el otro es más débil. La matriz son las relaciones de poder”, explicó la periodista Barcaglioni.
LA MAYORÍA SON JÓVENES. El 33,3% de las mujeres asesinadas en 2008 tenía entre 15 y 24 años. Las menores de 15 años representan el 15,2% de las víctimas y el 20,9% de los homicidios corresponde a mujeres entre los 25 y los 35 años. Un 17% de las víctimas tenía entre 36 y 45 años. En un 8,6% de los casos las agredidas fueron mujeres entre los 46 y 55 años, y el 2,8% restante tenía entre 56 y 65.
Qué pasa en otros países
Aunque la cifra es similar a la de la Argentina, en España sí hay registros oficiales sobre los hechos de femicidio: en 2008 se registraron 73 asesinatos de mujeres cometidos por alguien del entorno familiar. “Allá lo llaman ‘terrorismo doméstico’ –precisó la periodista Gabriela Barcaglioni– y tienen más conciencia del problema desde el Estado. Existen tribunales específicos y hay medidas de protección”, comparó.
En la ciudad mexicana de Juárez y algunos rincones de Guatemala se disputan hace años el primer lugar en Latinoamérica en matanza de mujeres.
La situación fue denunciada en Naciones Unidas y se pidió la intervención del Estado para la resolución de esos crímenes. La particularidad en Ciudad Juárez es que allí, desde principios de los años 90, han desaparecido mujeres sistemáticamente y no se volvió a saber de ellas, hasta que sus secuestradores hicieron aparecer sus cuerpos sin vida, con evidencias de haber sido violadas, torturadas y con algunas partes de sus cuerpos quemadas.
Otro estudio para el mismo crimen
“En la Argentina 207 mujeres han sido asesinadas por la violencia sexista”, dice el informe de la asociación civil La Casa del Encuentro, que hizo su propia recopilación de los femicidios publicados durante 2008, en base a la información de los diarios de distribución nacional y provincial y las agencias de noticias DyN y Télam.
Bajo la consigna “No mires para otro lado. La indiferencia te hace cómplice”, la entidad registró que los culpables de estos crímenes fueron, en primer lugar, los esposos, concubinos, parejas y novios de las víctimas; en segundo lugar, ex parejas; luego, desconocidos que ejercen violencia sexual; y por último, aquellos hombres con alguna vinculación familiar.
Debido a que no existen estadísticas oficiales, el informe aclara que en el relevamiento no se pudo contemplar a aquellas mujeres que ingresaron a los hospitales tras haber sufrido violencia de género ya que en los certificados de defunción sus muertes figuraron como “paro cardiorrespiratorio”.