Los argentinos tienen en el exterior US$ 123.700 millones
1 En qué consiste.
Quienes tengan fuera del país dinero que no esté declarado podrán declararlo sin traerlo al país, pero pagarán 8% de impuesto. Los que lo declaren y lo traigan pagarán 6%. Quienes lo traigan para comprar títulos de la deuda que emite el Gobierno pagarán 3 %. Y aquellos que traigan el dinero para inversiones en infraestructura, sector inmobiliario y actividades rurales pagarán solamente el 1%.
2 Quiénes no podrán entrar.
Quedarán excluidos «todos los que hayan estado en la función pública durante cualquier época en cualquiera de los tres poderes del Estado».
3 Un guiño a las provincias.
La plata que se recaude por este blanqueo será coparticipada con las provincias. Con esta decisión el Gobierno busca conseguir el apoyo de los gobernadores a su iniciativa.
4 Cuánta plata hay afuera.
La iniciativa apunta a que los argentinos blanqueen al menos una parte de los US$ 123.700 millones que tienen bajo el colchón, en cajas de seguridad, en inversiones financieras y en depósitos en el exterior, según los últimos datos oficiales. Se estima que gran parte de ese dinero no está declarado. El proyecto también podría ayudar a blanquear activos no declarados pero que están en el país.
5 Ventajas para el Tesoro
Si el blanqueo prospera parcial o totalmente, el Gobierno Nacional y las Provincias lograrían varias cosas: recaudación extra, ingreso de capitales en momentos en que el crédito externo está cortado con salida de divisas del país y volcar parte de esos fondos para emprendimientos productivos, sostener la cotización de los títulos públicos o el valor del dólar. Además, una vez declarados esos capitales generarían ingresos impositivos adicionales, ya que sus dueños pagarían Bienes Personales u otros tributos si generan ingresos adicionales. Igual, se admite la posibilidad de blanquear dinero u otros activos en el exterior ante la AFIP, sin la obligación de ingresar los fondos al país.
6 Borrón y cuenta nueva.
La ventaja del blanqueo para el que no declaró ingresos es que, a cambio del pago de esas alícuotas, se establece una suerte de perdón por los impuestos no abonados al Fisco cuando se generaron esos ingresos. Se supone que, al menos, el que ahora blanquee, tuvo que haber pagado y no lo hizo, el impuesto a las Ganancias –que puede llegar hasta una tasa máxima de 35%–. Además, no declaró ese patrimonio todos los años en el impuesto a los Bienes Personales. También si esos ingresos fueron generados por ventas no declaradas, tuvo que haber pagado IVA u otros impuestos según la naturaleza de la operación. El blanqueo genera una situación de inequidad con el contribuyente que declaró sus ingresos y pagó Ganancias.
7 Qué pasará en las provincias.
Según los expertos, las provincias deberían adoptar una legislación complementaria sobre el blanqueo de capitales porque muchos fondos no declarados tuvieron que haber pagado tributos provinciales.
8 Las dudas.
La apuesta del Gobierno es que la desconfianza en el sistema financiero internacional hará que muchos argentinos prefieran traer sus activos al país. En parte esto estuvo pasando, pero a través del circuito informal. Sin embargo, desde el inicio de la crisis internacional hubo un fuerte salida de capitales de la Argentina. Entre enero de 2007 y setiembre de 2008 sumó US$ 25.329 millones, según las cifras del Banco Central. Esto refleja que antes que traer capitales al país, la gente continuó sacando parte de sus ahorros (ver infografía). Por esa razón, muchos especialistas sostienen que los blanqueos pueden ser exitosos en períodos de recuperación económica. Pero su resultado es dudoso cuando se vive una etapa de incertidumbre.